Callar nos va matando por dentro, sin embargo, hay ocasiones en las que no nos es permitido hablar, así queramos, simplemente no nos escucharán y hay otras, en las que ni siquiera vale la pena hacerlo; creo que en esos casos, escribir lo que sentimos es una buena opción, para no guardárnoslo.
Me encantan tus estrategias para el bienestar, también a mí me funcionan, lo mejor es no dejarse ahogar por las penas, mientras estemos pataleando, no nos hundiremos.
Un gran abrazo amiga.
Sí, hay que desahogarse de alguna manera, pero si ves que los puentes de comunicación están rotos, hay que alejarse y seguir nuestro camino. Con dolor en el alma porque son personas que forman parte de nuestras vidas, pero el tiempo y a distancia ayudan a sanar.
Espero leerte, mi bella.
Sí, es difícil cuando son parte de nuestro círculo cercano y más cuando no podemos romper los vínculos que nos unen.
Un abrazo.