Español
Un algo… perdón por la falta de formalidad y prolijidad de este escrito, pero vamos, que el arte no tiene que tener necesariamente estructuras y límites.
Con la imagen de mi amada abuelita en mi memoria y en honor a todos los ancianos, nació esto, así dejando a mis dedos escribir.
Ella que espera
La tarde la encuentra vacía.
No hay personas ni sonidos, no hay preguntas ni respuestas.
Un hueco atardecer la sorprende mientras en silencio intenta adentrarse en las letras de aquel libro añejo, de hojas amarillas ajeadas por el tiempo y por las manos que lo poseyeron.
Decide que leer no le apetece y lo cierra.
Mira a la nada, a una televisión curva y apagada que no la incentiva en nada, y piensa en encenderla, pero ¿para qué? Solo habrán noticias nefastas sobre los males que aquejan al mundo.
Piensa en sus hijos y nietos, y sonríe, pensando que quizás uno la sorprenda aquella tarde de invierno, sabiendo que tan solo se ilusiona con un sueño, pues el frío está para calar los huesos.
Se levanta de aquella silla de patas curvas que le dejó su mamá, y acomoda el almohadón que había debajo de sus nalgas. Para que todo quede prolijo, pues así le gusta que se vea su casa, y va a la cocina, a ver si algo le despierta el apetito.
Nada.
Las comidas han perdido su sabor así como su cuerpo parece haberse quedado sin adrenalina.
Se sienta en una silla de por ahí, cerca del horno, y recuerda su época dorada, cuando todos alababan sus comidas elaboradas.
Aquellos ya no estaban, habían partido en busca de nuevas esperanzas.
Anciana y con la piel arrugada, había quedado atrás, aferrada al sueño de que un nuevo horizonte aparecería, o más bien resignada porque sus pasos ya no eran audaces y su corazón estaba cansado de andar.
En aquella silla, un sonido, algo le tocó los tímpanos. El frenar de un auto le generó curiosidad, y rápidamente se levantó de allí y se fue hacia la ventana.
¿Alguien ha venido?
¡Alguien ha venido!
Movió su antebrazo derecho para que se escurriera hasta sus dedos aquel pintalabios rosa que le había regalado su hija mayor y que guardaba bajo la manga, como tantas otras cosas, pero en el intento salieron pañuelos y hasta un pedacito de pan.
Voilà, allí estaba el labial.
Con delicadeza se lo colocó, sus sobrinos estaban allí.
La adrenalina despertó su cuerpo, la imaginación acechó en su mente, su estómago le indicó cuál sería el plato de comida, en fin, a las siete de la tarde, el día había decidido amanecer.
Que tengan un hermoso fin de semana amigos!
Con cariño,
English
A something... sorry for the lack of formality and prolixity of this writing, but come on, art does not necessarily have to have structures and limits.
With the image of my beloved grandmother in my memory and in honor of all the elderly, this was born, leaving my fingers to write.
She, who waits
The afternoon finds it empty.
There are no people or sounds, no questions or answers.
A hollow sunset surprises her as she silently tries to delve into the letters of that old book, with yellow pages worn by time and by the hands that owned it.
She decides that she does not feel like reading and closes it.
She looks at nothing, at a curved and turned off television that does not encourage her in anything, and thinks about turning it on, but what for? There will only be dire news about the evils that afflict the world.
She thinks of her children and grandchildren, and smiles, thinking that maybe one of them will surprise her that winter afternoon, knowing that she is only dreaming of a dream, because the cold is to warm the bones.
She gets up from that chair with curved legs that her mother left her, and arranges the cushion under her buttocks. To make sure everything is neat, because that's how she likes her house to look, she goes to the kitchen, to see if anything will whet her appetite.
Nothing.
The meals have lost their flavor just as her body seems to have run out of adrenaline.
He sits on a chair over there, near the oven, and remembers his golden age, when everyone praised his elaborate meals.
Those days are gone, gone in search of new hope.
Old and with wrinkled skin, she had been left behind, clinging to the dream that a new horizon would appear, or rather resigned because her steps were no longer bold and her heart was tired of walking.
In that chair, a sound, something touched her eardrums. The braking of a car made her curious, and she quickly got up from there and went to the window.
Has someone come?
Someone has come!
She moved her right forearm so that the pink lipstick that her eldest daughter had given her and that she kept up her sleeve, like so many other things, would slip onto her fingers, but in the attempt, handkerchiefs and even a piece of bread came out.
Voila, there was the lipstick.
She delicately put it on, her nephews were there.
Adrenaline awakened her body, imagination lurked in her mind, her stomach told her what the food dish would be, in short, at seven o'clock in the evening, the day had decided to dawn.
Thanks a lot for being here my friends!
Have a wonderful weekend!
With love,
Hermoso, me recuerda la imagen del ciclo de la vida, de polvo eres y en polvo te convertirás, mis abuelitas pasaron a otro plano, pero especialmente una, la mamá de mi papá, fue como una madre para mi. Regalos de la vida.
Así es… estamos y nos vamos, y las/los abuelos son bendiciones de la vida
Que genial y hermoso, es imposible no sentirse emotivo y nostálgico a medida que se va leyendo, ojala las abuelas fueran eternas pero bueno, muchas gracias por compartir esta genial pieza, Bendiciones y bonito fin de semana @belug ☺
Muchas gracias a vos por pasar, leer y comentar! Es un placer que te haya gustado!!
Es un escrito muy bonito, evoca recuerdos y pinta un escenario que muchas familias viven. Las abuelas siempre son especiales. Saludos.
Así es! Muchas gracias por tu comentario! Me alegra mucho que te haya gustado!
Hola muchachona bonito escrito, la vejez es algo que cierra el ciclo de vida y con ellos las costumbres en las que el ciclo debe cumplirse, en este caso me alegra a la señora mayor la visitaran y pudiera tener un bonito dia junto a sus seres queridos que con tanta ilusion ella anhelaba. Al final me confundi porque lei amanecer en la tarde pero creo te refieres a que como los sobrinos llegaron a esa hora, el dia para la protagonista de esta historia empezo en ese momento. Saludos muchachona :D
Así es, es exactamente lo que quise decir, ella estaba como dormida, adormecida, pero despierta porque su día “comienza” cuando llegan sus sobrinos. 😊