Porque nos dejan tan pronto

in Cervantes4 years ago

Hoy voy a hablarles sobre mi vida con las mascotas, que inicié entre los 8 y 14 años, cuando me fui a vivir junto con mis padres a una casa de campo, ubicada en Ruiz Pineda, la Hacienda-Caricuao-Caracas. Y digo casa de campo, no porque estuviera en el Campo precisamente, sino porque estaba ubicada en un sector de la ciudad de Caracas que aún no había sido urbanizado, llamado la Hacienda y allí se habían asentado inmigrantes portugueses que se dedicaban a la siembra de vegetales y hortalizas.
Era una casa sencilla y con un gran patio, en el que teníamos muchos animales, principalmente, chivos, gallinas, patos, pavos y piscos. Disponía de dos estanques grandes, otros más pequeños, siempre llenos de agua en los que habitaban peses diminutos, ranas y sapos. lo pase muy bien, entre animales, árboles y jardines.


colombia-293573__340.jpg
Fuente: Pixabay

En el suelo se habían construido pequeñas cavidades cubiertas con cemento en los que yo colocaba agua para que abrevaran todos los animales que ahí habitaban. En aquel hermoso lugar, tenía árboles de mango y guayaba, esta fruta era mi preferida y ahí había en abundancia por lo que la mayor parte del tiempo la pasaba, como una mona, montada en esas matas comiendo guayabas. Esta actividad me ocasionó frecuentes reprimendas de parte de mi madre porque descuidaba las tareas del hogar.
Y digo que ahí fui feliz, porque ahí mi padre de crianza, me regaló mi primera mascota, una chiva que crie desde recién nacida hasta grande, cuando murió ahogada en uno de los tanques llenos de agua. Esa chiva a la que llamaba Celeste, me enseño la confianza, el amor y el respeto por los animales. Cuando murió, la lloré mucho porque, no pude estar presente cuando cayó en el estanque y no pude sacarla. El dolor por la pérdida de Celeste me dejo por mucho tiempo sin deseos de tener otra mascota.


goat-4427178_640.jpg
Fuente: Pixabay

Luego de esa experiencia con mi primera mascota, a los 14 años me fui a estudiar, me gradué a los 18 años y comencé a trabajar, trabajaba durante el día y estudiaba durante en la noche, por 10 años en la Ciudad de Caracas y luego en Puerto Ordaz en Ciudad Guayana en el Estado Bolívar. Luego de varios años de trabajar y residir en Puerto Ordaz, sentí la necesidad de tener una nueva mascota y llevada con el recuerdo de la película llamada “101 Dálmatas”, me dispuse comprar una perrita dálmata de apenas 3 meses de edad.


winter-2146705_640-varios dalmatas.jpg
Fuente: Pixabay

La nueva mascota, la llamé Pecas, por las manchas de su piel, era un amor, hiperactiva, juguetona y cuando yo llegaba a la casa, de 5 a 6 horas de la tarde, ella me recibía saltando y moviendo su cola. Demandaba mucha atención y solo quería que yo jugara con ella, cosa que ya a esa hora, me sentía cansada y no tenía muchas ganas de atenderla. Los veterinarios me explicaron que esa raza de mascotas era especial para niños y no para mi caso que estaba poco tiempo en casa. Sin embargo, no quise salir de ella y la acepté como era. Pecas creció y se convirtió en una hermosa vibrante animal que podía salir corriendo a recibirte, a saludarte y tumbarte solo haciéndote cariños.

Pecas, estuvo conmigo por 4 años, luego acordé llevársela a casa de mi madre Quintina y hermana, Rosa Virginia, cuya mascota se les había perdido, al salido de la casa, por un descuido, al dejar la puerta abierta para recibir el servicio de gas y necesitaban una mascota que la acompañara. A los meses de llevar a Pecas a la casa de mi madre, me di cuenta que había sido un error porque, ella era muy activa y fuerte y mi mamá ya tenía unos 70 años y mi hermana tenía una contextura delgada y no la podían manejarla. Así que hablamos con nuestro hermano mayor, Hernán; quien vive en Carrizal, a quien le gusto la Pecas y se la llevo a su casa. Allí ella se adaptó bien, fue cruzada con perros de su raza y tuvo varias crías de pequitas. Finalmente, Pecas fue donada al cuerpo de Bomberos de Los Teques Estado Miranda.


raza-dálmata.jpg
Fuente: Mascotarey

Seis meses después de darle a Pecas a mi hermano, llegó a mis manos otra mascota, una perrita callejera, mestiza con Pomerania, era pequeñita de apenas dos meses de edad, la cual fue encontrada por mi hermana, Alix Beatriz, a la puerta de su casa en San Jacinto en Maracay estado Aragua. Mis mis sobrinos Marcos y Andrés, que eran unos niños para ese momento, se encargaron de bañar y limpiar de pulgas y garrapatas a la perrita, porque estaba minada de esos bichos. Esa perrita que me regalo mi hermana Beatriz, mis sobrinos llamaron Puky y a mí me pareció mejor Punky.

IMG_20190104_150215 (1)punky.jpg

Punky es la perrita que ha motivada la escritura de este blog para Hive y ustedes se preguntaran porque, y antes de explicárselo hago un paréntesis para contarles una anécdota que la mayoría de las personas que tienen mascotas, la conocen, pero yo deseo recordarla para quienes no la conocen y el cuento es como sigue.

Un niño va con sus padres y su mascota al veterinario porque, estaba muy enfermo y habían acordado mandarlo a dormir y antes que el Veterinario se llevara al perro para proceder, el padre del niño le pregunta al Veterinario, ¿Dr. explíqueme porque los perros se van antes que la gente? El Dr. Le dice, la verdad, no lo sé ni me había hecho esa pregunta. El niño reacciona y les dice a todos, yo lo sé, yo lo sé. El padre le dice al niño, a que bueno explícanoslo; y el niño dice, “Los perros se van antes que la gente, porque ellos vinieron a la tierra a enseñarnos a Amar a los humanos y cuando han cumplido su misión, se van” Al escuchar la explicación del niño, el padre y la madre lloraron, el niño no lloro porque dijo que su perro ya había cumplido su misión de enseñarlos a amar a ellos.


veterinary-85925__340.webp
Fuente: Pixabay

A Punky me la lleve desde Maracay hasta Puerto Ordaz en el 2005, y ha sido para mí, una excelente compañera, amorosa y tierna, siempre a mi lado, como una sombra. Me ha acompañado a todas partes, incluyendo a viajes largos, como cuando viajada desde Puerto Ordaz a Maracay y de regreso. Yo hacía un viaje de 10 a 12 horas y ella me acompañaba sin mayores contratiempos, ni siquiera hacer sus necesidades, porque parecía que tenía miedo a que la abandonara en el camino y evitaba que la sacara del vehículo cuando salíamos de viaje. Así fue como aprendí a vivir y compartir con ella, y como dice el cuento del niño, me enseñó a amarla y a amar.

Punky es una perrita maravillosa, originalmente era de color marrón rojizo con las patitas blancas, como si tuviera media en sus patas, muy coqueta y saltarina, caminaba como si fuera un caballo de paso fino. En el transcurso de su vida y muy joven en sus primeros celos, tuvo piometria y fue operada en dos ocasiones para curarla. También sufrió de abscesos rectales y de piel, los cuales fue superando a través de tratamientos médicos

IMG_20200816_091203.jpg

Hoy en el 2020, Punky tiene 15 años conmigo, está presentando problemas propios de esa edad, los cuales se han agudizado en lo que va de este año. Su pelaje se ha decolorado, y tiene su trompa canosa, ha perdido la vista, el oído, olfato y sufre de artritis por una escoliosis invertida en la columna. Y lo más grave en lo que va de año, está presentando desequilibrios y pierde fácilmente el equilibrio de sus patitas traseras y tiende a caerse. No tiene el sentido del espacio, choca contra las paredes y se expone al ataque de otros perros al no percibir con su olfato los riesgos de entrar al territorio de otros animales.

Este lunes 14 de septiembre 2020, busque la asistencia de un médico veterinario a domicilio, quien vino a la casa, la oscultó a Punky, y me dijo que tiene una pequeña infección respiratoria y un problema neuronal. Gracias a dios, su corazón y resto de funciones está bien. Le prescribió tratamiento, el cual le estoy aplicando con la esperanza extender su calidad de vida durante esta etapa final y prepararme para su partida.


fractal-1280081__340 (1).webp
Fuente: Pixabay

De momento, quiero despedir a Punky de este planeta tierra, con la esperanza del contenido de la lectura que hice de un Fascículo Libro del Conocimiento, según el cual, durante la evolución de las especies en todo cosmos, se formaron millones de planetas, entre ellos; el planeta de los monos, el planeta de los gatos y el planeta de los perros. Estas últimas tres especies, se encuentran a penas a un paso de su evolución para convertirse en Un Ser Humano. Así mismo explica que, cuando esos animales conviven con los humanos, el humano lo ayuda a dar ese salto cuántico. Yo espero Punky sea un Excelente Ser Humano para su próxima existencia y yo haya contribuido un poco en eso. Gracias por leer.

Las imagines sin fuente, fueron tomadas con mi camara.

Sort:  

Qué hermoso texto y que enriquecedora experiencia, @justinmar. Aunque solo he tenido una mascota y hace ya mucho tiempo, sé el significado que tienen ellas en nuestras vidas. Seguro que Punky será un ser maravilloso, como tú le has enseñado con tu ejemplo. Ha sido un verdadero placer leerte. Saludos

Hola @nancybriti, agradecida por tu comentario sobre el tema y por interpretar mis sentimientos por este tipo de seres que nos dan su amor incondicional. Abrazos.

Congratulations @justinmar! You have completed the following achievement on the Hive blockchain and have been rewarded with new badge(s) :

You received more than 700 upvotes. Your next target is to reach 800 upvotes.

You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word STOP

Do not miss the last post from @hivebuzz:

Update for regular authors

Me conmueve que un niño pueda ser capaz de entender el amor de esa manera. Nosotros al crecer solemos olvidar.

Hola @ andreasalas, si es increible y te digo que la primera ves que lei ese cuento, yo llore; porque yo misma no me habia dado cuenta de ese pequeño detalle. No se si el cuento fue real o inventado por algunas persona amante de los perros, lo importante es que tiene sentido. Gracias.

foto perfil.jpg

Hola @sancho.panza, gracias por responder a mi post con tu foto. Saludos.