Siempre he querido ir por esos lugares y de ahí subir a Ainhoa, el pueblo con mi nombre.
Hasta la fecha aún no lo he conseguido pero espero poder ir algún día con alguien ya que al no tener vehículo y no haber conexiones con trenes y buses lo tengo jodido.
Merece la pena visitar el norte aunque como bien has dicho los lugares remotos tienen difícil comunicación.