Mi amigo, te confieso que he bailado mucho esta canción de la orquesta de Billos. Pero, por primera vez, le presto atención a la letra de la misma. Creo que, como dice la canción:
El camino no tiene fin.
Y las miserias humanas tampoco. Un abrazo inmenso.
Querida Sol. Originalmente, era una balada, pero Billos le puso ese ritmo bailable y pegajoso, sello de su época dorada.
Como humanos imperfectos estamos sujetos a sufrir sucesos fortuitos, aunque me temo que muchas miserias son ocasionadas por envidias, rencores y otras bajezas como las lealtades equivocadas.
Un abrazo fuerte, muy fuerte.
Comparto plenamente tu planteamiento, amigo mío.