Mi primer trabajo formal fue bajo la tutela de personas de nacionalidad portuguesa. Es uno de los gentilicios más trabajadores que he conocido. Quien soy como adulto se lo debo en la mayor parte a mis padres, pero sería muy descortés de mi parte, no reconocer de quienes aprendí el amor por el trabajo duro, como proveedor del éxito. Crecemos con una idea inerme en nuestro ADN: el menor esfuerzo para el mayor beneficio.
No es una tara, ni algo desaprobable. Es cuestión de economía de esfuerzo para el ahorro energético. Es una condición de la que gozaban los humanos primigenios, con el fin de ahorrar energías cuando el alimento era escaso. Cada gentilicio tienen maneras diferentes de desarrollar esa eficiencia en el consumo energético.
Sin embargo, el tamaño de las expectativas en la vida tiene que ser directamente proporcional a la cantidad de esfuerzo dedicado a obtener una meta. Lo que eres como humano te perseguirá toda la vida, estés en el país donde te encuentres. Es así como muchas personas emigran pero no están dispuestas a pagar el precio del esfuerzo y deben regresar a sus países de origen. Y es así también como los portugueses tuvieron éxito en la sociedad venezolana. Emigraron, trabajaron duro y obtuvieron un nivel de vida más que respetable, como consecuencia de ese esfuerzo.
Ahora un esfuerzo debe ser hecho en el área que te apasiona de verdad, porque si no será sembrar en campo estéril. Así, cuando comencé a trabajar, muchas horas dedicadas a crecer como empleado, me granjearon una carrera meteórica dentro de aquella organización. Comencé a los 17 años mi andar profesional, a los 19 era jefe de sección, a los 21 jefe de departamento, a los 23 Gerente de Administración y a los 25 llegué a Gerente General.
Demasiado joven. El tiempo me ha entregado la perspectiva sobre que a cualquier persona, no le debe recaer esa responsabilidad antes de los 35 años. Cuando ya hay la madurez suficiente para llevar una carga difícil. Liderar personas es una de las profesiones más desgastantes y desagradecidas de cualquier área del quehacer humano. Cuando usted posee la visión, pero los demás no son capaces de verla, pues, se compra enemigos de gratis.
Y es así también que, muy a su pesar, el éxito de cualquier emprendimiento pasa por las lágrimas de saberse solo en la consecución de los objetivos. Y nada más cuando las personas comienzan a ver que los resultados, la reputación y el prestigio te anteceden, es que los aplausos llegan. Eso sí, no sin haber llorado antes: de rabia, impotencia, tristeza, conmoción y frustración por la incomprensión de la gente.
Fue así, bajo ese esquema, que logramos hacernos con una corporación gigantesca que, en su mejor momento, tuvo 1.500 empleados directos y otros tanto indirectos. 12 años como empleado y 23 como dueño, hicieron que el agotamiento y las ganas de dedicarme a escribir surgieran. Era un sueño largamente acariciado y que nos trajo, finalmente a #Hive.
Al principio todo normal, escribía y me recompensaban. Pero el gusanillo del liderazgo estaba allí. Jodiendo. Y entonces comenzó de nuevo. Primero en @cervantes y luego con @fulldeportes. Han sido muchas horas invertidas. Creo difícil exista alguien que haya trabajado tan duro como yo dentro de la plataforma en términos del tiempo dedicado a ella, en mi área de competencia. No me malinterpreten. Cada quien ha hecho su parte en esto. De otro modo no tendríamos el éxito como la colmena que somos.
Pero vaya que hemos trabajado. Hoy me escribieron un mensaje al privado que me hizo llorar. Y me hizo llorar por la misma razón por la que el éxito se construye con lágrimas. Cuando leo vainas como esa, me reconforta pensar que, por lo menos, para algunos, no hemos estado arando en el mar. Y ese es un sentimiento al que todo ser humano debe aspirar. Ese sentido de realización sin igual.
La cantidad de horas de trasnocho, de tomas fotográficas, de vídeos, de redacción tanto para mi blog como para los de otros, las peleas, los haters, los downvotes, tantas vainas negativas, han valido la pena. Y si me preguntan ¿lo volverías a vivir? Lo haría de nuevo sin dudar. Porque no se trata de mí, sino de lo que puedo aportar a #Hive como uno más de éste universo.
Las personas tienden a subestimar a #Hive por dador de recompensas. Si lo vieran como yo lo veo, no imagino donde nos encontraríamos ahora. Sin duda mucho más adelante. Pero las cosas no siempre van a la velocidad que deseas. La teoría general de sistemas plantea que un sistema se mueve a la velocidad del más lento de sus componentes.
Y es allí, desde esa perspectiva que las mezquindades se dejan de lado y se construye para todos. Es así como las lágrimas seguirán para poder forjar el mañana que tantos merecemos. Eso sí, jugando limpio. Nada hace perder más la confianza que cuando hay componentes de un sistema que quieren hacer trampas. Si el valor de una moneda está ligado a la confianza, parte de nuestro esfuerzo es eliminar a los tramposos. Y es por ellos que las lágrimas continuarán.
Go Karts, Universal Boulevard y The Hamptons at Metrowest respectivamente, Orlando, Fl
¡Gracias por leer..!
¿Quieres tener tu propio blog y la libertad financiera que significa
el mundo cripto? ¡Haz clic en la firma!
My social networks
 |  |  |  |
Mi hermano @fermionico Brutal de verdad lo que acabo de leer, una vida con un ritmo violento pero con pasos firmes en todo momento, de verdad que un aplauso para usted, el trabajo duro, con esfuerzo y dedicación son claves para el éxito, pero también se necesita pasión para ello saludos y que sigan los éxitos en este lindo transitar por Hive que esperemos sea por muchos años, abrazos desde Venezuela para Orlando jajajaj.
Gracias por su amable comentario.
La construcción de una meta pasa por duras vivencias, pero de resultados satisfactorios
Y sólo hay por decidir transitar el camino.
Saludos
The rewards earned on this comment will go directly to the person sharing the post on Twitter as long as they are registered with @poshtoken. Sign up at https://hiveposh.com.