Vaya, sí... Sin duda es un pañuelo...
Yo también guardo recuerdos muy bonitos y sabrosos de esa época en el Santander, en la que dimos parrandas cañoneras, navideñas y serenatas a granel.
Pues, un encuentro creo que sería una buena manera de recordar en grupo, lo cual es más poderoso que de manera individual.
Gracias por esta dosis de alegría que me trajiste. Quedo aún con la incógnita de saber quiénes son esas fans... ;-)