Terror en el Pico – Parte II

in #spanish6 years ago

Hola muy buenos días tengan todos en la comunidad de @steemit, el día de hoy les traigo la segunda parte de la historia "Terror en el Pico". Les dejo el Link para que lean la primera parte los que aún no lo han hecho.

Terror en el Pico - Parte I

No nos quedó de otra más que esperar a que subiera el otro grupo de rescatistas, para poder bajar nosotros hasta la primera estación.

  • Chino: Y ahora que vamos hacer Arquimedes, ya tenemos aquí más de una hora y aún nada que llega el vagón con el nuevo grupo de rescatistas.
  • Yo: Vamos a seguir esperando, ¿qué más podemos hacer?, ya ellos deben estar por llegar.

Pasadas dos horas más, aún no subía el vagón con los rescatistas y los trabajadores del teleférico que habían ido adelante en búsqueda de los excursionistas tampoco regresaban. El frío ya a esa hora, las 6:00pm, se hacía insoportable, sentía un fuerte dolor de cabeza, se me dificultaba respirar, las náuseas y mareos no me dejaban tranquilo.

  • Yo: Vamos a tener que regresarnos caminando, son como tres horas de caminata, pero creo que es mejor empezar a caminar y no esperar aquí tranquilos a que podamos morirnos de frío y por falta de oxígeno.
  • Chino: Yo también pienso que eso es lo mejor, ya no aguanto las ganas de vomitar y el dolor de cabeza, el frío me está matando.

Comenzamos de inmediato la caminata, muy asustados porque no conocíamos el camino, pero seguíamos un sendero que se ha formado por el paso de los excursionistas en el tiempo. Íbamos lo más rápido posible caminando, pero la noche llego a nosotros muy rápidamente, el sendero ya casi no se veía, teníamos que ayudarnos con la luz de nuestros teléfonos y el reflejo de la luna.

Ya teníamos algo más de dos horas caminando, subiendo y bajando montañas, sin tomar nada de agua, sin haber almorzado, pero en nosotros había un objetivo claro que nos daba fuerzas y motivación para seguir adelante, el cual era llegar hasta las luces de la ciudad que podíamos ver a lo lejos.

A las 9:30pm pudimos llegar hasta la primera estación del teleférico, la verdad es que cada vez que recuerdo ese momento, digo que fue Dios quien nos guio y protegió por todo el camino. Unos oficiales de la guardia nacional nos atendieron de inmediato y nos llevaron hasta un puesto de emergencia médica que tenían en esa estación. Lo que sucedió después de ahí lo desconozco, desperté tres días después en una clínica de la ciudad y lo primero que veo al despertar es a una señora llorando de alegría, gritando que se había despertado.

Esa señora que gritaba de emoción era mi madre, perdí completamente la memoria, no sabía dónde estaba, quienes eran las personas que estaban en la habitación observándome, no sabía quién era yo, no sabía nada.

Continuará..