Muchas personas de manera equivocada siempre hablan de su primer amor refiriéndose a aquella mujer o aquel hombre que marco su vida en el plano sentimental para siempre, a través de este capítulo (No.2) en el libro tu Zonas Erróneas aprendemos algo que es muy cierto y que siempre pasamos por alto, mi primer amor soy yo mismo, no puedo llegar a querer a alguien si no soy capaz de amarme.
Valorarnos por lo que piensan los demás es destruir nuestra autoestima, es entregar el control de nuestras emociones a los demás y convertirse en el títere manejado al antojo de un tercero.
Es necesario cambiar la percepción en cuanto al valor que tenemos cuando cometemos errores o cuando nos equivocamos o cuando tenemos mucho éxito, nuestra valoración es mucho más que eso, tienen que ver con la manera como nos sentimos y nos asumimos ante algún fracaso o ante algún triunfo, la idea de que somos valiosos debe partir del mero hecho de que existimos, porque somos seres humanos únicos e irrepetibles.
Es necesario cambiar nuestra manera de pensar, de lo que somos y de cuanto valemos ante situaciones estresantes, es desarraigar de nuestra mente el poco valor que nos damos cuando por lo que sea nos sintamos infravalorados.
Pensar que lo que valemos viene dado por nuestros triunfos y fracasos se convierte en la segunda zona errónea que nos aleja de la felicidad, ante esto un cambio de paradigma en la manera de pensar será suficiente para comenzar a eliminar esa zona errónea que no nos permite crecimiento personal
Cambiar supone tiempo, disciplina y constancia, la felicidad es un camino que se construye paso a paso por eso el momento de comenzar hacer feliz debe ser ahora mismo, reconociéndote amándote y cambiando la percepción que tienes de ti.
Un abrazo..............................Francisco Franco