A las Puertas del Hades - Conversaciones con un Conejo / At the Gates of Hades - Conversations with a Rabbit

in Cervantes4 years ago (edited)

imagen.png
Fuente/Source


Separador rojo.png

Español


Separador rojo.png

A las Puertas del Hades

Conversaciones con un Conejo

Después de una extraña y escalofriante cena, en la que, al ritmo de una enervante sinfonía de graznidos, mugidos, maullidos y aullidos, los jóvenes se retorcieron, restregaron, frotaron y untaron, todo tipo de comidas, en cualquier parte corporal imaginable e inimaginable, para luego empezar a comerse lo esparcido, en el sitio donde había quedado, todo esto ante mi atónita y consternada mirada, se empezaron a aproximar a mi gateando y arrastrándose por el piso, con intensiones que preferí no imaginar.

―Mis hermosas criaturas ―no sé por qué, pero se me ocurrió llamarlos así ―. No me siento con animo de jugar con ustedes ahora ―dije, esperando que detuvieran su inquietante avance.

―¿Le hemos decepcionado en algo maestro? ―preguntó, con un suplicante rostro, manchado de chocolate, la misma hermosa joven que había hablado antes.

―No querida, es sólo que me siento un poco cansado, no he estado bien de salud últimamente, y siento que mi corazón palpita muy aceleradamente ―dije, esperando convencerlos con esta historia.

―En ese caso maestro, ¿qué desea que hagamos? ―preguntó ella.

―Quisiera que se retiraran, pero me gustaría que tu querida ―dije, señalando a la joven que parecían liderizar al grupo ―. Te quedaras a hacerme compañía.

―Con gusto maestro, pueden irse condiscípulos, el maestro y yo nos quedaremos solos ―dijo, dirigiéndose a los otros jóvenes.

Los restantes seis salieron de la habitación, tal cual estaban, “espero que vayan a darse una ducha”, pensé, mientras los veía salir.

Sin prestar atención a la joven, que permanecía a gatas en el suelo, me senté en uno de los sofás que cubrían todo el derredor de la habitación y apenas caí en el asiento, la joven gateó hacia mí y empezó a frotarse contra mis piernas, mientras gemía y maullaba, me incline hacia adelante y la tomé por sus hombros, resbalosos por estar untados quien sabe con qué, y la hice incorporarse y quedar de rodillas frente a mí.

―Detente por favor, quiero hablar contigo ―le dije.

―¿No prefiere darme una lección?, maestro, ansío una de sus lecciones y de sus reprimendas cuando no la aprendo bien ―me dijo provocativamente.

Sentí que los vellos de la nuca se me erizaron, y extrañamente se me vino a la mente la idea de lo bien recreada que era la experiencia de estos avatares, desde hace un rato había perdido la noción de que no era yo mismo quien estaba en esta habitación, cuándo recobré la conciencia de donde estaba, la chica me observaba provocativa y expectante, aguardando a mi respuesta.

―Con gusto lo haría, pero no me siento bien de momento, como te dije antes ―le dije.

―Entonces, ¿que desea de mí?, maestro, ¿qué quiere que haga?

―Sólo quiero hablar, eso podría relajarme y calmar mi malestar ―le dije.

―Y luego me reprenderá ―insistió.

―Luego hablaremos de eso, pero necesito que me respondas algunas preguntas ―le dije.

―Dígame maestro, ¿Qué me quiere preguntar?

―Dime querida, ¿eres un avatar o algún tipo de simulación? ―le pregunté, esperando que fuera un avatar y su verdadero cuerpo estuviera en otro lugar.

―No maestro, todos nosotros somos reales, vivimos aquí sólo para satisfacer los deseos de los visitantes ―me dijo, sin ningún tipo de reserva. Por lo visto no era ningún tema prohibido, el hablar esto con los huéspedes.

―Entiendo querida. Sabes, desde hace algunas semanas he sentido un nuevo tipo de apetito, he tenido el deseo de aprendices más jóvenes, aquí en Avalon, ¿habrá ese tipo de discípulas?

―¿Qué tan jóvenes maestro? ―dijo

―Digamos mucho más jóvenes que tú, aprendices que apenas estén en edad de estar en la academia ―pregunte, pensando en el rango entre los siete y quince años.

―Tenemos compañeros y compañeras de provienen de Tetis y su aspecto es mucho más juvenil, pero no tanto ―me dijo.

―No me refiero a eso, tienen que ser realmente de esas edades ―dije

―Creo que debería hablar con Roldan, él es el coordinador de experiencias y estoy seguro de que a un visitante tan asiduo y confiable como usted, podrá arreglarle algo en Olimpo ―dijo la joven

―¿Olimpo? ―pregunté intrigado, esperando no parecer demasiado ignorante.

―Olimpo, es la hermana mayor de Avalon, allá todo es posible y necesidades como la suya, creo que pueden ser saciadas ―me dijo.

Era la primera vez que escuchaba hablar de tal cosa, por lo visto había más cosas ocultas de los ojos del Parlamento de lo que creen las autoridades, al menos formalmente.

―¿Podrías tu decirle a Roldan que quiero acordar eso con él? ―le pregunté.

―Claro maestro, es mi deseo complacerlo ―me dijo.

―Hazlo entonces, querida.

―Y no me va a dar mi lección ―dijo, poniendo cara de desamparo.

―El mayor placer que puedes darme hoy, es ayudándome a que Roldan me proporcione lo que necesito ―le dije, pasando mi mano por su mejilla.

Su rostro dibujó una sonrisa de satisfacción, se puso de pie y corrió a la puerta, se detuvo antes de salir y volteo a donde yo estaba―. Le diré sus deseos a Roldan y diré que quiere hablar con él.

―Gracias mi querida niña, dile que lo esperaré aquí ―le dije señalándole que siguiera adelante.

Después de todo, no sé si había sido su intención o fue pura casualidad, pero Vicky, a pesar del predicamento en que me puso, había acertado con la identidad que me dio. Sólo esperaba, que esto realmente me condujera a las chicas secuestradas.

Texto de @amart29 Barcelona, Venezuela, septiembre de 2020


Separador rojo.png

English


Separador rojo.png

At the Gates of Hades

Conversations with a Rabbit

After a strange and chilling dinner, in which, to the rhythm of an enervating symphony of squawks, mooing, meowing and howling, the young people squirmed, smeared, rubbed and smeared, all kinds of food, on every imaginable and unimaginable body part, And then they began to eat what was scattered, in the place where I had left it, all this before my astonished and dismayed eyes, they began to approach me crawling and crawling on the floor, with intentions that I preferred not to imagine.

-My beautiful creatures -I don't know why, but it occurred to me to call them that-. I don't feel like playing with you now, -I said, hoping that you would stop their disturbing advance.

-Have we disappointed you in something, master? -asked the same beautiful young woman who had spoken before, with a pleading face, stained with chocolate.

-No my dear, I just feel a little tired, I haven't been in good health lately, and I feel my heart beating very fast -I said, hoping to convince them with this story.

-In that case, Master, what do you want us to do? -she asked.

-I would like you to leave, but I would like your dear one, -I said, pointing to the young woman who seemed to be leading the group-. You will stay and give me company.

-With pleasure, master, you may leave, the master and I will be left alone, - he said, addressing the other young people.

The remaining six left the room, just as they were, "I hope you'll go take a shower," I thought, as I watched them leave.

Paying no attention to the young woman, who was standing on all fours on the floor, I sat down on one of the sofas that covered the whole of the room and as soon as I fell into the seat, the young woman crawled towards me and began to rub against my legs, while moaning and meowing, I leaned forward and took her by her shoulders, which were slippery from being smeared with who knows what, and made her stand up and kneel down in front of me.

-Stop, please, I want to talk to you, -I said.

-Wouldn't you rather give me a lesson, teacher, I long for one of your lessons and your reprimands when I don't learn it well, - she said to me provocatively.

I felt the hairs on the back of my neck stand up, and strangely enough, the idea of how well recreated the experience of these avatars was came to my mind. For a while now I had lost the notion that it was not I myself who was in this room, and when I regained consciousness of where I was, the girl looked at me provocatively and expectantly, waiting for my answer.

-I would gladly do that, but I don't feel well at the moment, as I told you before -I said.

-So, what do you want from me? master, what do you want me to do?

-I just want to talk, that could relax me and calm my discomfort, -I said.

-And then you will rebuke me, -she insisted.

-We'll talk about it later, but I need you to answer some questions -I said.

-Tell me, teacher, what do you want to ask me?

-Tell me, dear, are you an avatar or some kind of simulation? -I asked her, hoping that she was an avatar and her real body was somewhere else.

-No master, we are all real, we live here only to satisfy the wishes of the visitors, -she told me, without any reservations. Apparently it was not a forbidden subject, to talk about this with the guests.

-I understand, my dear. You know, for some weeks now I have felt a new kind of appetite, I have had a desire for younger apprentices, here in Avalon, will there be such disciples?

-How young a teacher? -she said

-Let's say much younger than you are, apprentices who are barely of academy age-ask, thinking about the range between seven and fifteen years old.

-We have classmates from Tethys and they look much younger, but not that much, -he said.

-I don't mean that, they have to be really that age, -I said.

-I think you should talk to Roldan, he is the experience coordinator and I am sure that a visitor as assiduous and reliable as you will be able to arrange something for you at Olympus, -said the young woman

-Olympus? -I asked intrigued, hoping not to seem too ignorant.

-Olympus is Avalon's big sister, everything is possible there and needs like yours, I think they can be met, - she told me.

It was the first time I had heard of such a thing, apparently there were more things hidden from the eyes of Parliament than the authorities believe, at least formally.

-Could you tell Roldan that I want to settle this with him? -I asked her.

-Of course, master, it is my wish to please you, - she said to me.

-Do it then, my dear.

-And you will not give me my lesson, -she said, looking helpless.

-The greatest pleasure you can give me today is to help me get what I need from Roldan, -I said, running my hand over her cheek.

Her face drew a satisfied smile, she stood up and ran to the door, stopped before leaving and turned to where I was. -I will tell Roldan your wishes and say that you want to talk to him.

-Thank you my dear girl, tell him I'll wait for him here, -I told her pointing to go ahead.

After all, I don't know if it was her intention or if it was pure coincidence, but Vicky, despite the predicament she put me in, had been right about the identity she gave me. I was just hoping, that this would really lead me to the kidnapped girls.

Text of @amart29 Barcelona, Venezuela, September 2020


Separador rojo.png

Otros relatos de la serie A las Puertas del Hades


Separador rojo.png

Gracias a todos por visitar mi publicación, espero sus comentario y agradezco su apoyo, hasta la próxima


Thank you all for visiting my publication, I hope your comments and I appreciate your support, until next time


Separador rojo.png

Sort:  

#posh Twitter Link:

Congratulations @amart29! You have completed the following achievement on the Hive blockchain and have been rewarded with new badge(s) :

You got more than 2500 replies. Your next target is to reach 2750 replies.

You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word STOP

Do not miss the last post from @hivebuzz:

Feedback from the September 1st Hive Power Up Day

Oye que buena imaginación tienes para inventar todos esos diálogos! Ya debes tener un libro completo! 👌 Saludos? 🤗

Nice post..

Una historia escalofriante.

Wuau excelente relato amigo @amart29