Muy buenas noches @eugelys !!
En casa hace muchos años que dejamos de consumir los cubitos de caldos y comenzamos a prepararlos de manera casera en casa, motivados por comenzar a mantener una alimentación más natural y tratando de eliminar lo máximo posible los productos ultraprocesados que sabemos que se caracterizan por tener un pobre valor nutricional y un gran contenido de ingredientes de laboratorio que no sabemos que consecuencias puede llegar a tener sobre nuestro organismo.
En casa también utilizamos mucho el jengibres y la cúrcuma para nuestra sopa, pero la verdad es que nunca he visto que vendan raíces de apio. Aquí se vende mucho la parte verde del apio que es un infaltable en la preparación de nuestras sopas.
En la próxima visita a la verdulería consultaré sobre la raíz de apio.
Te dejo un gran abrazo
Así luce la raíz de apio amigo, aquí le decimos apio a las dos,de hecho cuando estaba redactando este post, tuve que agregar la palabra raíz pues pensé que podría ser que muchos no la conocieran, en la cocina venezolana hogareña usamos mucho las "verduras" de este tipo que no son consumidas en otras regiones como el *mapuey o el ñame".
El sabor del apio (raíz) es delicioso, posee el sabor suavizado de los tallos de apio/célery y un toque un tanto dulce, se logra una crema sedosa y de un hermoso color amarillo, espero que la consigas y que si la pruebes te guste.
Respecto a los cubitos, yo los consumía y también la famosa sopa maggie, pero cuando supe lo del glutamato monosódico ya no las usé mas, uso algunos productos que lo contienen como la salsa de soya, pero es algo muy esporádico,no como antes.
Gracias por pasar comentando y dejar tu sabía opinión, saluuudos.
Muchas gracias @eugelys por enviar las fotos y tu explicación. Seguramente si no encuentro las raíces en la verdulería quizá pueda encontrarla en alguna de las tantas chacras que producen verduras sin utilización de agroquímicos, donde suelen tener un gran conocimiento en el arte de sembrar y utilización de su producción.
Vos sabés que nosotros comenzamos a tener conciencia de los caldos comerciales cuando mi esposa quedo embarazada de mi primer hija y comenzamos a conversar sobre el tema de la alimentación. Allí comenzamos a leer la letra chica de los envases y leímos que en los caldos Maggi y los Knor la letra chica decía que no era aconsejable el consumo de los caldos en mujeres embarazadas ni en niños menores a cinco años. También hacía mención de que no debía consumirse comidas recalentadas en las que se hayan utilizado ese tipo de caldos.
Desde ese momento empezamos a hacerlo casero.
En la medida de lo posible debemos volver a las raíces y tener una conciencia sobre los alimentos que consumimos para modificar nuestros hábitos alimentarios y dejar de incorporar en nuestro organismo químicos producidos en laboratorios que no sabemos a ciencia cierta el efecto que pueden tener en nuestro organismo, ni en nuestra salud.
Es muy enriquecedor leer publicaciones en las que podamos aprender y que puedan servir para lograr una mejor calidad de vida!
Gracias por tu amabilidad y por siempre aportar valor con tus publicaciones.
Te dejo un gran abrazo!